El estadio olímpico Luzhnikí, que acogerá la final del Mundial de Rusia 2018, ha terminado la instalación del graderío (66.310 asientos), según anunció hoy el Ayuntamiento de Moscú.

"Pronto comenzaremos a instalar los asientos de la tribuna y la zona de prensa. La grada estará completada a finales de marzo", dijo Andréi Bochkariov, jefe del Departamento de Construcción de Moscú, a medios locales.

El Luzhnikí, que será inaugurado en noviembre por la Argentina de Messi, conservará la histórica fachada y aumentará el aforo del antiguo estadio Lenin de los actuales 78.000 a los 81.000 asientos.

"El césped natural sobrevivió bien el invierno. Prácticamente, hoy mismo se podría jugar al fútbol en este campo. (Las raíces de) La hierba ha alcanzado una profundidad de 15-17 centímetros", dijo.

El funcionario municipal recordó que en su momento en el campo del Luzhnikí se plantaron 450 kilos de semillas, que fueron seleccionadas teniendo en cuenta las condiciones climatológicas de la zona donde fue erigido el estadio.

El Luzhnikí acogió en 2008 la única final inglesa de la Liga de Campeones entre el Chelsea y el Manchester United con victoria del segundo a los penaltis.

Según el comité organizador, el Luzhnikí acogerá tanto el partido inaugural como cuatro partidos de la fase de grupos, uno de los octavos de final, una semifinal y la gran final mundialista.

El pasado año el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, se mostró "impresionado" durante la visita de inspección al estadio olímpico.

El Luzhnikí no acogerá este verano la Copa Confederaciones, que se disputará en cuatro estadios (San Petersburgo, Spartak Moscú, Kazán y Sochi).

EFE